¿Quién
va? ¿Quién regresa? ¡Vamos, todos vamos!
Nadie
mira atrás, nadie se afana.
El
lugar es el descanso. Quien llega, quien reside,
perpetua
la psique y la carne.
Pobres
los que atrás quedan, penosos lo que se aferran;
sus
ojos envenenan la razón, ¿De dónde van a asirse?
¡Tierra
ya no queda, agua o aire! ¿Dónde anclar las huellas?
¿Dónde
colgar la mirada? cuerpo soluble ¿Dónde habrá de disolverse?
Sigo a quien me precede, quien me ha heredado el derrotero.
No hay
vuelta atrás, no hay mirada que nos lleve,
ni
siquiera en círculos absurdos caminamos, siempre adelante vamos.
Veredas,
caminos, senderos, todos llevan al mismo lugar.
Me
iré, me voy, caminando me adelanto a quien me sigue.
Un
lugar tan cercano que no hace falta caminar tanto;
sentado o dormido llegar se puede.
He
emprendido el viaje, lugares recónditos he visitado:
prehistóricos
y modernos, selváticos, con cemento,
pero
en cualquier porción de tierra, bajo los pies está el destino,
el
lugar más lejano al que puedo partir: muerte.
@viktor_reader